Miércoles 08 de julio de 2015 – 10:45 AM
El papa Francisco comienza este miércoles su primera
visita a Bolivia, segunda etapa de su gira de ocho días por América Latina
iniciada el domingo en Ecuador, donde abogó sin cesar por "los
excluidos", criticó los "liderazgos únicos" y lanzó un
apremiante llamamiento para que se proteja a la "madre Tierra".
Francisco cierra su escala en Ecuador con visitas a
un asilo y al santuario de la Virgen de El Quinche, a las afueras de Quito.
Hacia el mediodía, partirá a Bolivia para visitar La Paz y Santa Cruz, y
permanecerá hasta el viernes 10, cuando viajará a Paraguay, donde culminará su
gira por Sudamérica.
El primer papa latinoamericano de la historia, quien
presidió dos multitudinarias misas, fue ovacionado, besado y homenajeado con
lluvia de pétalos de rosas por fieles que desafiaron el calor bochornoso de
Guayaquil y el frío y la lluvia en Quito para escuchar sus palabras. Cientos de
ecuatorianos salieron a las calles tanto de Quito como de Guayaquil para verlo
pasar en su papamóvil.
Durante las 48 horas que permaneció en Ecuador,
Francisco lanzó sin tapujos severas advertencias a los gobernantes y a la
sociedad política, en un mensaje que calzó con el convulso presente político de
Ecuador.
El presidente, Rafael Correa, un confeso admirador
de Francisco, aprovechó para aliviar las tensiones y suscitó reacciones
encontradas al asomarse el lunes acompañado por el papa al balcón del palacio
de Gobierno, en un gesto que fue interpretado como una manera de arrancar una
bendición papal a su gestión.
- Unidad y diálogo -
Pese a la agenda apretada que el representante de la
Iglesia cumplió, que incluyó una visita al Santuario de la Divina Misericordia
y reuniones con viejos amigos del colegio de los jesuitas, representantes de la
sociedad civil y jóvenes, Francisco mostró una impresionante vitalidad y fuerza
de voluntad en todos los encuentros.
A través de varias llamadas a "la unidad"
y "al diálogo", el líder de la Iglesia Católica logró una tregua
entre el Gobierno y la oposición para bajar la temperatura de un Ecuador
caldeado por las protestas.
Como una petición a los gobernantes
latinoamericanos, Francisco pidió también que el crecimiento económico llegue a
todos "y no se quede en las estadísticas macroeconómicas".
"El papa se pone por encima de las partes con
su capacidad de enviar un mensaje de amor, de persona de diálogo y sin entrar
en particulares", declaró con su tradicional prudencia el portavoz del
Vaticano, el padre Federico Lombardi.
- El futuro del planeta -
En Bolivia, que comparte la selva amazónica con
Ecuador, Colombia, Brasil y Perú, el papa deberá abordar de nuevo la defensa de
la "madre Tierra" e invocará su encíclica verde, 'Laudato si',
convencido del papel de los países de la franja amazónica en la preservación
del planeta.
"Tienen una oportunidad para ejercer la
pedagogía de una ecología integral", señaló.
La etapa más difícil de su visita será la llegada al
aeropuerto de El Alto, a más de 4.000 metros de altitud, ya que le extirparon
un pulmón durante su juventud.
Según el Gobierno, es previsible que el papa masque
o 'acullique' hojas de coca para mitigar los efectos de la altitud.