El Gobierno estadounidense apostó este martes por aflojar la tensión con China al aplazar parte de los aranceles a las importaciones chinas previstas para septiembre hasta el 15 de diciembre, en un movimiento que llega antes del inicio de otra ronda de negociaciones bilaterales el próximo mes.
Este alivio temporal de la presión ante la nueva ronda de negociaciones con China parece reflejar la preocupación sobre el impacto que la guerra comercial con el gigante asiático tiene en la economía de Estados Unidos, que ha ido creciendo en los últimos meses.EFE