Miércoles 02 de agosto de 2017
La joven Wendy Salgado comenzó a dar sus primeros
pasos con un poco de dificultad, pero a la edad de 5 años, cuando sus padres
observaron que sufría múltiples caídas, preocupados acudieron al Hospital
Escuela Universitario (HEU) y recibieron un devastador diagnóstico: su hija
padecía de distrofia muscular.
Con lágrimas, su padre José Ramón Salgado, recordó que
se enteró que su primogénita no sufría caídas por tropezar, sino porque sus
músculos eran débiles y tenía que usar una silla de rueda para movilizarse.
Decepcionados, regresaron hasta el municipio de Guaimaca, Francisco Morazán.
La pequeña Wendy no pudo ir a la escuela como los
demás niños de su aldea, por no poder caminar y sufrir constantes dolores
musculares en sus piernas y brazos, así que con la ayuda de su abuela aprendió
a confeccionar pulseras y collares para venderlos.
“Mi mamá la cuida, ella se movilizaba en silla de
ruedas, pero el mes pasado el caso fue más grave, ella quedó inmovilizada… Ya
no tiene movimiento en los músculos”, comentó su padre.
Añadió que con un ingreso de 200 lempiras al día como
agricultor le ha sido difícil poder adquirir los medicamentos que su hija
necesita, razón por la que acude a consulta al HEU, donde en algunas ocasiones
carga en sus brazos a su hija, de una sala a otra por exámenes que recetan practicarle.
“El tratamiento ha sido bueno, no he pagado nada, el
hospital me da las medicinas que ella ocupa tomar”, dijo Salgado.
El pasado mes de julio, la salud de Wendy empeoró. No
podía injerir ningún tipo de alimentos, razón por la que su padre la llevó a
consulta y quedó bajo observación médica desde hace tres semanas porque también
sufrió un accidente cerebrovascular.
Don Ramón clama ayuda para su joven hija, porque le
recetan un reposo permanente en un colchón de agua, pañales y una silla de
ruedas, en vista del avance de su terrible enfermedad que ha cortado sus sueños
y metas desde hace 20 años.
Para quienes desean ayudar a esta humilde familia a
adquirir el equipo médico que Wendy necesita, pueden llamar al número de
teléfono 8857-7612.
Las distrofias musculares son un grupo heterogéneo de
enfermedades genéticas que causan degeneración y debilidad del músculo
esquelético. Hay algunos tipos de distrofia muscular que afectan al corazón,
ojos, columna, glándulas endocrinas y el cerebro.
La debilidad es generalmente progresiva, aunque
muestra períodos de la detención, y algunos tipos de agotamiento muscular
comienzan durante años de la infancia o de la niñez temprana, con curso severo,
mientras que otros que vienen conectados en la vida posterior y pueden ser muy
suaves.
Entre las señales tempranas de la distrofia muscular,
en la que los padres deben prestar atención en los niños, es cuando presentan
dificultades en doblar los codos y debilidad en los músculos faciales.