Martes 25 de julio de 2017
LOS ANGELES (AP) — Barbara Sinatra, la cuarta esposa
del legendario cantante Frank Sinatra y una prominente defensora de los niños y
filántropa que recaudó millones de dólares para ayudar a jóvenes abusados,
falleció el martes. Tenía 90 años.
Sinatra murió de causas naturales en su casa en Rancho
Mirage, California, rodeada por familiares y amigos, dijo John Thoresen,
director del Barbara Sinatra Children's Center.
Con la ayuda de su esposo, Barbara Sinatra fundó en
1986 un centro sin ánimo de lucro para proporcionar terapia y otro tipo de
apoyo a jóvenes víctimas de abuso físico, sexual y emocional.
Desde entonces, dijo Thoresen, más de 20.000 niños han
sido tratados en el centro en la ciudad desértica de Rancho Mirage, y cientos
de miles más alrededor del mundo a través de los videos que provee.
Barbara Sinatra, una exmodelo y exvedette de Las
Vegas, ya era una dama de sociedad prominente en Palm Springs antes de casarse
con su marido en 1976, cuando él tenía 60 años y ella 49. Permanecieron unidos
hasta la muerte de él en 1998, a los 82 años.
Al cantante lo conoció por medio de su esposo
anterior, Zeppo Marx, del famoso grupo de comedia Marx Brothers. Marx y Frank
Sinatra fueron buenos amigos y vecinos en Rancho Mirage hasta que ella dejó a
Marx.
Fue su tercer matrimonio, el cuarto para Sinatra y el
más duradero para ambos.
Frank Sinatra estuvo casado previamente con Nancy
Sinatra (la madre de sus hijos Nancy y Frank Jr.), así como con la actriz Ava
Gardner, fallecida en 1990, y Mia Farrow.
A lo largo de los años, Frank y Barbara Sinatra
desempeñaron un papel activo en el centro para niños.
"Frank venía y se sentaba y les leía a los
niños", dijo Thoresen del artista a veces volátil.
"Pero la mejor manera en que ella usó a
Frank", agregó riendo, "era cuando le decía, 'Necesito medio millón
de dólares para esto, así que haz un concierto y me das la mitad del
dinero'".
Permaneció activa en el centro hasta hace poco,
impulsando la creación del programa de video apenas el año pasado y
asegurándose de que los niños tuvieran todo lo que necesitaban, dijo Thoresen.