Miércoles 03
de mayo de 2017
Un
manifestante en llamas, otro bajo las ruedas de una tanqueta, una multitud
huyendo de militares en motos que lanzaban bombas lacrimógenas. La violencia se
desató el miércoles durante una nueva jornada de protestas en Caracas,
cobrándose otra vida.
Armando
Carrizales, de 18 años, falleció al ser impactado en el cuello por un proyectil
de origen desconocido, según autoridades de salud, durante una batalla campal
entre manifestantes y efectivos de seguridad en Las Mercedes, en el este de la
ciudad.
Su deceso
elevó a 32 la cifra de víctimas fatales en un mes de protestas en Venezuela, en
las cuales los manifestantes exigen elecciones generales para sacar del poder
al presidente Nicolás Maduro.
Los
disturbios de este miércoles, con feroces choques en horas de la tarde,
comenzaron después de que militares y policías bloquearan el paso a una marcha
de miles de personas en la estratégica autopista Francisco Fajardo.
Vociferando
contra el gobierno y los uniformados, a quienes llamaban "asesinos" y
"malditos", los manifestantes respondieron con piedras, pero
terminaron replegándose ante el avance de vehículos blindados que disparaban
ráfagas de bombas lacrimógenas y chorros de agua a presión.
La
movilización pretendía llegar a la sede del Parlamento, en el centro, para
rechazar la convocatoria de Maduro a una Asamblea Constituyente, que la
oposición denuncia como un "golpe de Estado" para eludir cualquier
elección.
- El caos -
"¡Resistencia!
¡Hacia adelante, no joda!", gritaba una joven encapuchada en la autopista,
mientras compañeros montaban barricadas con enormes tubos de cemento y bloques
que sacaron de una obra en construcción.
Pero no
lograron evitar que la vía fuese despejada y acabaron retrocediendo hacia Las
Mercedes y Altamira, donde estalló la violencia.
El caos se
apoderó del acomodado Altamira, donde volaron piedras y cócteles molotov ante
las bombas lacrimógenas de la Guardia Nacional, que formaban una densa nube
entre barricadas de basura y árboles derribados.
Allí se produjeron
las escenas más dramáticas: un joven se prendió fuego al explotar el tanque de
una motocicleta militar que había incendiado junto con varios encapuchados.
Corrió
desesperado pidiendo auxilio y se tiró al asfalto, mientas otras personas le
rociaban agua embotellada. El joven fue retirado por paramédicos.
La moto
había sido capturada por los manifestantes como trofeo tras una situación
confusa, en la que una tanqueta militar arrolló a un grupo de manifestantes y
le pasó por encima a uno de ellos, auxiliado inmediatamente por sus compañeros.
Inmóvil, con los ojos abiertos, fue evacuado del lugar.
Las
autoridades no han informado sobre el estado de ambos muchachos.
La
concentración fue disuelta luego de casi tres horas de refriegas, cuando
efectivos militares en moto avanzaron a alta velocidad hacia los manifestantes
mientras disparaban bombas lacrimógenas. La multitud huyó despavorida.
- Cientos de
heridos -
Los hechos
dejaron unos 300 heridos, según autoridades municipales.
Los primeros
lesionados se registraron en la autopista Francisco Fajardo, donde varios
resultaron afectados por los gases y fueron sacados en hombros. Un hombre
sangraba en la cabeza.
El vicepresidente
del Legislativo, Freddy Guevara, denunció que fue impactado en un pie por una
bomba lacrimógena y su colega Julio Montoya aseguró haber sido golpeado por
otra en la espalda.
Si bien la
marcha reunió a miles, la convocatoria de este miércoles fue menor a la de
otras movilizaciones del último mes.
Mientras se
desarrollaban los disturbios, Maduro entregaba en la sede del Consejo Nacional
Electoral (CNE) el decreto con el que convoca a la Constituyente.Frente a miles
de seguidores que se concentraron en el lugar, el gobernante dijo que tomó la
decisión porque sus adversarios escogieron el camino de la "insurgencia
armada".Maduro acabó el acto bailando, al tiempo que en el este de la
ciudad reinaba el caos.