Lunes 06 de octubre de 2014 – 05:30 PM
WASHINGTON (Reuters) - No es ningún secreto que
si tu padre y tu madre son altos, probablemente serás alto tú también. Pero
entender completamente la genética de la altura ha sido un asunto importante
para los científicos.
Los investigadores desvelaron el domingo lo que
ellos llaman el mayor estudio del tema hasta ahora, en el que analizaron el
genoma de más de un cuarto de millón de personas para identificar casi 700
variantes genéticas y más de 400 regiones del genoma relacionadas con la altura.
Cómo de alta o baja es una persona depende de un 80
por ciento de la genética según estima el estudio, y la nutrición y otros
factores representan el resto de las causas. La altura media de la población
del mundo se ha incrementado gracias a una mejora en la alimentación.
"Estudiamos la altura por dos razones
principales", dijo el Dr. Joel Hirschhorn, un genetista y endocrino
especializado en pediatría en el Hospital Infantil de Boston y en el Broad
Institute del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT)y la Universidad de
Harvard.
"Durante más de cien años ha sido un gran
modelo para estudiar la genética de enfermedades como obesidad, diabetes y asma
que también son causados por la combinación de varios genes actuando juntos.
Así que entendiendo el funcionamiento de la genética en la altura, podemos
entender la genética de enfermedades humanas", dijo.
Además, la corta estatura durante la niñez es un
tema importante para los endocrinos especializados en pediatría. Conocer los
genes y las variantes importantes en la altura podría ayudar a los médicos a
diagnosticar a niños con una sola causa subyacente de su baja estatura, añadió
Hirschhorn.
El equipo internacional de investigadores analizó
información de los genomas de 253.288 personas con antepasados europeos - todos
de Europa, América del Norte y Australia. Leyeron cerca de 2 millones de
variantes genéticas comunes en estos individuos e identificaron 696 variantes
de genes y 424 regiones relacionadas con la altura.
Localizaron muchos genes en el estudio, publicado en
la revista Nature Genetics, que probablemente sean reguladores importantes del
crecimiento esquelético pero que previamente no se creía que estuvieran
involucrados, dijeron los investigadores.
Otros relacionados son el colágeno, los componentes
de los huesos y cartílagos y las placas de crecimiento, las áreas de
crecimiento de tejido cerca de los extremos de los huesos más largos del
cuerpo.