Tegucigalpa, 8 oct (EFE).- El presidente de Honduras,
Porfirio Lobo, denunció hoy que su Gobierno está siendo víctima de una campaña
de desprestigio en el exterior, aunque no identificó con precisión quiénes
estarían detrás de esa acción.
"Están inventando una serie de cosas increíbles que no
son ciertas, es una campaña (de desprestigio) de la misma gente que quedó
arriba, que quieren ver un conflicto donde no hay", enfatizó el gobernante
durante la sesión del Consejo de Ministros que él preside los martes.
También indicó que "hay una campañita afuera (en el
exterior) sobre la participación de los militares en los temas de
seguridad", en alusión a la recién creada Policía Militar, que iniciará
operaciones este mismo mes, la que algunos sectores locales rechazan.
"Yo no voy a ceder en eso porque para mí es más
importante una vida, la seguridad de un hondureño o una hondureña que lo que
puedan opinar otros que no conocen nuestra realidad, ni lo que hemos
vivido", enfatizó Lobo, quien el 27 de enero de 2014 concluirá su mandato
de cuatro años.
Según Lobo, desde afuera también se estaría intentando
desacreditar el proceso de las elecciones generales del 24 de noviembre
próximo, en las que por primera vez participarán nueve partidos políticos,
cuatro de ellos surgidos tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 al
entonces presidente, Manuel Zelaya.
"No se me vayan a inquietar porque he sentido presiones
de afuera de algunos grupos que se quedaron en el conflicto (la crisis política
de 2009), hoy todos vamos a elecciones", dijo el presidente sin precisar
más datos.
Añadió que en el actual proceso electoral "no hay
ninguna expresión del pensamiento que no tenga el canal por donde llegar a
expresarlo en las urnas para tomar la decisión de quién es el hombre o la mujer
que nos va a gobernar".
"Están inventando una serie de cosas increíbles que no
son ciertas, es una campaña de la misma gente que quedó arriba, que quieren ver
un conflicto donde no hay", acotó.
Sobre la presencia de los militares cumpliendo misiones de
seguridad, expresó que obedece "a que en el país se vive una crisis
profunda producto de una agresión internacional de parte de bandas del crimen
organizado y el narcotráfico".
El presidente advirtió que cualquier gobierno que llegue al
poder en enero próximo tendrá problemas si retira a los militares de la calle
porque, afirmó, las Fuerzas Armadas están contribuyendo a reducir la ola de
criminalidad que vive el país, donde se registra una veintena de muertes
diarias.
"Lo que yo le reitero a cualquiera que venga a gobernar
Honduras (es que) si manda a los militares a los cuarteles y los saca de
participar en actividades de seguridad, van a ver ustedes el lío que vamos a
tener", indicó el gobernante.
Lobo considera que el asunto de seguridad no sólo es decir
que se está reduciendo la ola de criminalidad, sino que se trata de detener una
tendencia ascendente que se ha venido dando en el índice de homicidios.
Entre quienes se oponen a la participación de los militares
en misiones de seguridad figura la candidata del recién fundado partido
Libertad y Refundación (Libre), Xiomara Castro, esposa del expresidente Manuel
Zelaya, quien considera que los uniformados deben estar en los cuarteles. EFE
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