Publicado el 19/Octubre/2013 | 00:59
Seis de cada 10
mujeres han sido víctimas de algún tipo de violencia en el Ecuador, reveló la
Encuesta Nacional sobre Relaciones Familiares y Violencia de Género del
INEC.
Y este hecho afecta a todos los grupos de mujeres, en los diversos
niveles educativos y estratos socioeconómicos.
La violencia sexual se muestra con una creciente incidencia en el
país. Una de cada cuatro mujeres ha sufrido abuso sexual. Y
niñas y adolescentes son las más vulnerables: 3 684 niñas
entre 12 y 14 años fueron víctimas de violencia sexual en 2010 (un
promedio de 10 denuncias por día), según datos difundidos
ayer por este Diario.
De acuerdo con cifras oficiales, en 19 provincias el suicidio es
primera o segunda causa de muerte de jóvenes entre 10 y 19 años. Y
este se produce en esa edad sobre todo por depresiones a causa de
violencia, embarazos precoces y relaciones amorosas; para el Frente Ecuatoriano
de Defensa de Derechos Sexuales y Reproductivos, el suicidio de las menores
tiene relación directa con embarazos por acción de violencia sexual.
Al mismo tiempo, el aborto no especificado -el que llega como fruto de
complicaciones previas al sistema nacional de salud- representa la
primera causa de morbilidad femenina. Y el 90% de muertes de embarazadas se
produce por el limitado acceso a los servicios de salud.
Más allá del insólito final en la Asamblea del debate
sobre la despenalización del aborto por causa de violación con la
imposición presidencial a los legisladores del oficialismo para “un
voto orgánico” que dejó como antes la disposición en el
Código Penal, que no penalizaba el aborto para las
mujeres “idiotas” o “dementes” que hubieran sido víctimas de violación,
aunque ahora los legisladores cambiaron por
“discapacitadas mentales”, la violencia sexual en el país
sigue sin respuesta no solo en el Código Penal, sino en la
conciencia colectiva y la forma como enfrenta – o deja de enfrentar- este lacerante
problema la sociedad ecuatoriana.
Fuente: hoy.com.ec
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