Lunes 17 de julio de 2017
El presidente francés, Emmanuel Macron, prometió hoy a
las víctimas del atentado yihadista de Niza de hace un año y a sus familiares
una "lucha sin cuartel" contra el terrorismo en el interior y en el
exterior del país.
"Debemos a los muertos esa lucha sin
cuartel", afirmó Macron en el acto de homenaje en Niza a las 86 personas
que fueron asesinadas en el Paseo de los Ingleses de la capital de la Costa
Azul y a las más de 460 que resultaron heridas por la acción de un terrorista
con un camión que se abalanzó sobre la multitud.
"Responderemos con la lucha sin cuartel en el
interior y en el exterior de nuestras fronteras contra el terrorismo, en todas
partes", remarcó Macron.
Pero, puntualizó, hay que hacerlo "conservando
nuestros valores, nuestro Estado de derecho, el amor a la libertad y el
recuerdo de esos rostros que esa noche del 14 de julio (de 2016) amaban la
libertad, furiosamente".
Consideró "vital" arrancar de raíz la
ideología que alimenta ese terrorismo, para lo cual hay que actuar día tras
día: "Es la lucha de la cultura, de la inteligencia, de la escuela"
para "evitar el oscurantismo" y "para que el fanatismo no pueda
prosperar en el caldo de cultivo de la miseria y los desplazamientos. Es una
lucha moral de civilización".
El jefe del Estado se negó a citar el nombre del autor
de la matanza, el tunecino Mohamed Lahouaiej Boulhel, y tampoco quiso entrar en
la polémica que hubo sobre posibles fallos en el sistema de seguridad aquella
noche de la Fiesta Nacional en el paseo marítimo de Niza, que había sido
cerrado al tráfico para unos fuegos artificiales que presenciaron unas 30.000
personas.
Constató que el "dolor" entonces había
"fisurado la relación entre la República y los ciudadanos", pero
recalcó que "esos vínculos son indestructibles" y "se hará lo
posible para que la República recupere (la) confianza".
"El Estado no se sustraerá ni a su deber de
claridad, ni a su deber de compasión (...) No os abandonará nunca",
insistió.
Al respecto, garantizó a los supervivientes y a sus
familias todos los dispositivos de ayuda puestos en marcha en los dos últimos
años, ante las oleadas de acciones terroristas que ha sufrido Francia:
"Eso se os garantizará", declaró.
También lanzó un mensaje contra el extremismo y la
discriminación como respuesta frente a la amenaza terrorista, al recordar que
la noche del atentado "en Niza estaba el mundo entero porque la historia
de Niza es el mundo entero", una alusión indirecta a que entre las
víctimas había personas de diecinueve nacionalidades.
Ese atentado en un día tan señalado para Francia como
es el 14 de julio, su Fiesta Nacional, "nos recordó brutalmente el precio
de la libertad", manifestó.
"Esta libertad -agregó- sabemos lo que cuesta y
lo que nuestros enemigos están dispuestos a hacer para privarnos de ella".
Su discurso, que cerró la ceremonia pública de
homenaje, fue seguido por La Marsellesa, el himno nacional francés.