Jueves 11 de mayo de 2017
Los voluntarios que
ayudan a sentir placer sexual a personas con discapacidad
Varias organizaciones se
ocupan de los derechos laborales de las personas con discapacidad o de cómo
pueden llevar una vida independiente. Pero de sus derechos sexuales no muchos
se ocupan.
Esto precisamente es lo
que impulsa a la ONG Hand
Angels, cuyos miembros ayudan a obtener placer sexual a quienes tienen
serios problemas de movilidad.
El servicio dura 90
minutos, pero los voluntarios pasan meses preparándose. Para que la experiencia
sea satisfactoria, dicen, hace falta conocer bien la situación de cada uno de
los usuarios.
Vincent, el fundador de
Hand Angels, está él mismo postrado en una silla de ruedas debido a una
poliomielitis. Por eso, cuenta, entiende el tipo de problemas con los que deben
convivir los discapacitados.
Aunque los críticos
argumentan que estos servicios son una forma de prostitución, en la ONG
sostienen que su actividad es completamente legal en Taiwán, donde tienen su
sede.