Sábado 13 de mayo de 2017
La reconocida diseñadora
venezolana Carolina Herrera repudió este sábado el asesinato de un sobrino en
Caracas a manos de secuestradores y aprovechó para arremeter contra el
gobierno, al que tildó de "dictadura".
"Nuestra única
esperanza es que los trágicos asesinatos de nuestro joven sobrino, Reinaldo, y
su colega Fabrizio sirvan para mitigar la terrible carnicería y los asesinatos
que se comenten contra nuestra juventud en Venezuela", escribió Herrera en
la red social Instagram.
La modista de 78 años,
radicada en Nueva York, acompañó su condolencia con fotografías en blanco y
negro de ella y su sobrino Reinaldo Herrera, de 34 años, asesinado la noche del
jueves junto con su colega Fabrizio Mendoza, de 31.
La afamada empresaria
agradeció los mensajes de solidaridad recibidos y criticó en duros términos al
gobierno del presidente Nicolás Maduro, enfrentado a una ola de protestas
opositoras desde hace seis semanas que deja 38 muertos.
"La dictadura
comunista debe irse", expresó.
Los cuerpos de Herrera y
Mendoza fueron encontrados la noche del jueves en un vehículo en la autopista
que comunica a Caracas con la localidad costera de La Guaira, según la
Fiscalía.
Socios en una empresa de
arquitectura, fueron secuestrados en el estacionamiento del edificio donde
tenían su oficina, informó el comisionado Einer Giulliani, director de la
policía del municipio capitalino de El Hatillo (sureste).
Según Giulliani, los
familiares no denunciaron el caso de inmediato, sino que pagaron un rescate
cuyo monto no precisó.
El oficial comentó que
Mendoza era investigado por el Parlamento -de mayoría opositora- por
supuestamente recibir 11 millones de dólares del gobierno a una tasa
preferencial "de forma fraudulenta".
De acuerdo con la Fiscalía,
Venezuela registró 21.752 homicidios en 2016, una tasa de 70,1 por cada 100.000
habitantes, ocho veces mayor al promedio mundial.
La cifra incluso es
mayor, según la ONG Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), que estima en
28.479 las muertes violentas ocurridas el año pasado (91,8 homicidios por
100.000 habitantes).