Sábado 08 de
abril de 2017
Inder
Bugarin, corresponsal
BRUSELAS,
Bélgica, abril 8 (EL UNIVERSAL).- Tras emplear maletines bomba, armas largas,
cuchillos, camiones y vehículos privados, los drones cargados con explosivos
podrían ser el siguiente método utilizado por los simpatizantes del Estado
Islámico (EI) para causar terror en Europa.
Es la
advertencia que hace la unidad del Ministerio del Interior de Países Bajos,
responsable de combatir el terrorismo (NCTV por sus siglas en neerlandés), en
su última evaluación sobre la amenaza del extremismo a nivel global.
La instancia
expresa en el informe su preocupación sobre la capacidad innovadora y de
aprendizaje del Estado Islámico y sus seguidores.
“Miembros de
este grupo en Irak y Siria ya utilizan drones con explosivos en sus ofensivas
en el campo de batalla (...) En los canales de difusión del EI este tipo de
ataques son glorificados. Esto podría inspirar a los yihadistas en Occidente”,
alerta.
En una
misiva enviada al Secretariado del Parlamento, el Ministerio del Interior
sostiene que el empleo de artefactos aéreos no tripulados es una de las
tecnologías que evoluciona más rápido, y ante la cual las autoridades se están
quedando rezagadas respecto a la detección, identificación y neutralización de
los aparatos en ámbitos no autorizados.
Reconoce que
Holanda, identificado como uno de los principales blancos potenciales del
terrorismo islámico, apenas está desarrollando el protocolo multidisciplinario
sobre cómo responder a incidentes con drones.
La alerta es
emitida a escasos tres días de que el terrorismo sacudiera el metro de San
Petersburgo, con un atentado bomba que dejó un saldo de 14 muertos y 51
heridos.
De acuerdo
con el informe holandés, durante 2016 se registraron 22 ataques yihadistas en
Europa, Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. De ellos, 19 fueron
perpetrados por radicales que actuaron en solitario, aunque casi todos tuvieron
contacto con la red del EI y se inspiraron a través internet.
El documento
sostiene que Al-Qaeda, continúa siendo una amenaza, aunque la organización no
se ha adjudicado un atentado desde la ofensiva contra el semanario
"Charlie Hebdo".
Igualmente
acecha a Holanda y sus vecinos europeos el grupo Hay’at Tahrir al-Sham
(Organización para la Liberalización del Levante), creado en Siria en enero
pasado luego de la fusión de la organización fundamentalista Jabhat Fatah al
Sham con otras cuatro fracciones yihadistas.
Las tres
organizaciones registran en sus filas combatientes de origen holandés. Se
estima que 280 individuos con pasaporte holandés partieron a Irak y Siria para
combatir en nombre de la yihad; 50 de ellos habrían regresado hasta el pasado 1
de abril. El informe sostiene que los retornos podrían aumentar por la pérdida
de territorios del EI.