Sábado 25 de abril de 2015 – 07:40 PM
LONDRES (AP) — En momentos en que los líderes
mundiales y organizaciones caritativas globales intentan captar la magnitud de
los daños provocados por un terremoto que devastó Nepal, ofrecieron sus
condolencias por las casi 1.400 personas fallecidas y alistaron envíos de ayuda
para los sobrevivientes.
Los grupos de alpinistas luchaban por localizar a
los escaladores, mientras que los nepaleses en el extranjero hicieron su mayor
esfuerzo para hallar a sus familias en las zonas afectadas.
Debido a que el terremoto afectó las comunicaciones
telefónicas y vía internet, además de dañar varios caminos, el mundo exterior
aún no tiene un panorama claro de las necesidades en la zona tras el terremoto
de 7,8 grados.
Sin embargo, está claro que se necesita ayuda, y
rápido.
"Sabemos que hubo grandes daños y que el acceso
a las zonas rurales será muy, muy complicado para cualquiera", dijo Ben
Pickering, consejero humanitario de la organización Save The Children en Gran
Bretaña. "Los niños se verán afectados en muchos aspectos. Lesiones
físicas. Se verán separados de sus familias".
Algunas organizaciones de caridad organizaron
equipos de ayuda, pero la vía de acceso más conveniente a Nepal —uno de los
países más pobres del mundo— no está disponible: el aeropuerto de Katmandú está
cerrado a causa del terremoto.
Médicos Sin Fronteras informó que cuatro equipos
partirán el domingo en la mañana rumbo a Nepal desde la provincia de Bihar en
la India, cerca de la frontera. La organización también enviará 3.000 equipos
de pertrechos en los que se incluyen provisiones médicas.
AmeriCares mandó un equipo desde la India y
preparaba cargamentos de asistencia médica y provisiones de ayuda.
"Estamos preparados para ayudar de cualquier forma que podamos", dijo
el presidente y director general de la organización, Michael J. Nyenhuis.
Handicap International, que ya contaba con presencia
de 47 trabajadores en el área antes del sismo, preparaba una respuesta de
emergencia ante la situación.
Países alrededor del mundo han ofrecido ayuda, al
tiempo que el papa Francisco ofreció oraciones por las víctimas y aquellos que
trabajan para salvarlas.
"Su santidad encomienda las almas de las
víctimas a la gracia del Todopoderoso y ofrece aliento a las autoridades
civiles y personal de emergencia en sus continuos esfuerzos de rescate y
asistencia a todos los afectados por esta tragedia", afirmó el secretario
de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin, en un comunicado.
Se esperaba que el domingo al mediodía llegara a
Katmandú un equipo de búsqueda y rescate de 62 personas, además de seis perros,
reportó la agencia de noticias estatal china Xinhua, que citó a la
Administración Sismológica de China.
La Unión Europea está sopesando dar "ayuda
presupuestaria" a Nepal, de acuerdo a un comunicado realizado conjuntamente
por el jefe de política exterior, el jefe de desarrollo y el jefe humanitario
del bloque, sin brindar detalles ni cifras.
El primer ministro británico David Cameron señaló en
Twitter que "haremos todo lo posible por ayudar a los afectados".
Alemania, Noruega, Italia, Francia, Mónaco y México también prometieron ayuda.
Este último país sufrió un terremoto de 8,1 grados en el que murieron cerca de
9.500 personas en la capital del país en 1985.
La embajada de Estados Unidos en Nepal anunció un
fondo inicial de ayuda de un millón de dólares, y la Agencia de Estados Unidos
para el Desarrollo Internacional activó un equipo de búsqueda y rescate urbano.
El Departamento de Estado también creó una dirección de correo electrónico y un
número telefónico para cualquier persona que sepa de ciudadanos estadounidenses
que requieran asistencia en Nepal.
"Estamos trabajando muy de cerca con el
gobierno de Nepal para brindar asistencia y apoyo", dijo el secretario de
Estado, John Kerry. "Enviamos nuestras más sentidas condolencias al pueblo
de Nepal y toda la región afectada por esta tragedia. Estados Unidos está con
ustedes durante estos momentos difíciles".
En un vecindario de Nueva York donde habitan muchas
personas nepalesas, Dawa Sherpa se enteró que sus padres, hermanos y familiares
habían sobrevivido en su pueblo de Helambu.
"Mi familia está bien, pero mi aldea quedó
devastada", comentó. "Todas las casas se cayeron. El templo, el
templo budista, el templo ya no está".
Hari Acharya, dueño del restaurante Delhi Heights,
dijo que sus familiares, incluida su madre, su esposa y sus hijos están a
salvo, pero algunos amigos fallecieron.
"Es algo realmente malo", dijo. "Es
un auténtico desastre".
Dijo que el edificio en el que vivían varios
familiares se derrumbó y que la familia estaba "sentada en la calle".