Martes 03 de
febrero de 2015 – 08:30 PM
Tegucigalpa,
Honduras - Movilizó el Partido Nacional a una regular cantidad de activistas, en un
ejercicio de desvergonzado abuso de los fondos públicos, para mostrar respaldo
a Juan Orlando Hernández, quien ahora mediatiza su falsa Alianza con el Pueblo.
Ese mismo domingo, que el nacionalismo se movilizaba apoyando la supuesta
alianza con el pueblo, se anunciaba un nuevo y grosero aumento al precio de los
combustibles, en momentos en que el valor del crudo roza niveles históricos a
la baja en el fluctuante mercado internacional.
La mentira es evidente, la incongruencia es expuesta por el mismo
régimen sin empacho alguno.
El
propio Partido Nacional que se radicaliza cada día más en la aplicación del
nefasto modelo neoliberal, y que le apunta ahora a la privatización de la
saqueada -por ellos mismos-, Seguridad Social, que se impulsa en contra de
amplios sectores de la hondureñidad a través de Juan Orlando Hernández y su
sequito, convierte en demagogia pura, esa supuesta Alianza con el Pueblo que en
los hechos no es más que retórica, discurso vacío, que para nada puede
sostenerse frente a una realidad caracterizada por la imposición de medidas con
profundo sentido de desprecio por el
pueblo y la Nación.
El
Diputado de LIBRE por el departamento de Choluteca, Angel Sandoval, expone que
“una alianza con el pueblo cuando es auténtica, sana y real, promueve la
justicia, la igualdad, la inclusión, la seguridad comunitaria, la eficiencia de
los servicios públicos y el efectivo acceso de todos a estos servicios; no se
trata de palabrería, se trata de hechos concretos, tangibles y palpables para
la gente”.
En la
misma línea de pensamiento, Beatriz Valle, Diputada por Francisco Morazán y sub
jefa del colectivo parlamentario de Libertad y Refundación, manifestó que “la
fracasada marcha en apoyo a la Alianza con el Pueblo, es la ridícula, frágil,
pero costosa respuesta del gobierno más débil de la historia, frente a la
inminente amenaza que representa una posible alianza de los cuatro partidos de
oposición y la impopularidad de un gobernante que desgobierna mediante la
amenaza, la re militarización y la profundización de la desigualdad”.
Finalmente
el diputado por el departamento de Colón, Wilfredo Paz, también sub jefe de
LIBRE en el CN expresó que “no puede ser real una alianza con el pueblo cuando
se recorta el presupuesto destinado al área social, y por ende se tienen los
hospitales sin medicinas y al pueblo sin empleo, cuando se entrega la soberanía
nacional y se traspasan los recursos estratégicos del Estado al capital
privado; no existe alianza con el pueblo cuando se criminaliza la protesta
social y se le aplica la fuerza militar y la maquinaria judicial a quien la
haga”.
Estamos
pues ante otra farsa más, en días en que los maquillados “éxitos” en materia de
seguridad sufren otro golpe de realidad, cuando el gobierno de los EEUU emite
una nueva alerta para sus ciudadanos, en la que advierte que “los niveles de delincuencia y violencia en
Honduras siguen siendo preocupantemente elevados”. Despilfarro y demagogia, esa
forma de administrar el Estado por el Partido Nacional, persiste.