Lunes 09 de marzo de 2015 – 02:20 PM
Nueva York, marzo de 2015._ La Representante
Permanente de Honduras ante las Naciones Unidas, Embajadora Mary E. Flores,
expresó su firme respaldo al Cardenal Oscar Andrés Rodríguez en la ONU, tras
hacer este un fuerte llamado a la ONU a garantizar el acceso equitativo al agua
potable y saneamiento como derecho humano y no seguir permitiendo las prácticas
e injusticias que han puesto en alto riesgo no solo la existencia de este bien
común, sino que las vidas de millones de personas, principalmente en países en
desarrollo.
El Cardenal Rodríguez se dirigió a los Estados miembros de la ONU,
representantes de la sociedad civil y un nutrido grupo de estudiantes, en un
evento especial organizado por los Salesianos de Don Bosco y la Misión
Observadora Permanente de la Santa Sede, en ocasión de celebrar el bicentenario
de San Juan Bosco.
En su mensaje, su Eminencia fue rotundo en exigir
que se ejerza el acceso al agua y saneamiento como un derecho humano a nivel
nacional e internacional, y que las fuentes de agua dulce sean manejadas como
un recurso común, protegidas de la especulación privada y el abuso; citando una
serie de injusticias que han agravado la pobreza, la crisis alimentaria, el
cambio climático y la salud de las poblaciones, sobre todo entre los infantes.
“Si los objetivos de desarrollo sostenible son erradicar verdaderamente la
pobreza, entonces también se debe fortalecer la capacidad de los Gobiernos de
proporcionar servicios básicos a todos.
Los Gobiernos no deben renunciar a su
obligación de garantizar el acceso universal al agua potable y saneamiento,
trasladando esta obligacion a las empresas privadas”, enfatizó
Tras finalizar la disertación del Cardenal
Rodríguez, tomó la palabra la Embajadora Flores, quien recordó que en 2010 la
Asamblea General de la ONU, por iniciativa del Gobierno de Bolivia, adoptó una
resolución declarando el acceso al agua y saneamiento un derecho humano
fundamental.
“Respaldamos plenamente el llamado que hace el Cardenal Rodríguez.
En la transición a la nueva Agenda de Desarrollo Sostenible post 2015, los
Estados tenemos el deber de abordar los retos que se avecinan, conjuntamente
con la sociedad civil, los lideres y los buenos ejemplos que existen dentro de
nuestras comunidades, especialmente nuestros jóvenes, de manera que los niños y
niñas puedan crecer con los recursos adecuados para desarrollar su potencial y
cumplir su rol constructivo en la sociedad”, añadió.
“Vivimos tiempos complejos, con múltiples retos y
problemas. Debemos tomar responsabilidad hoy mismo a fin de salvar a nuestra
gente, nuestros recursos y nuestra herencia cultural en cada rincón del
planeta. Debemos tener fe en Dios para guiarnos cada día en nuestras
decisiones, y trabajar diligentemente en crear sociedades inclusivas, pacíficas
y productivas, donde predominen los valores, la empatía y la solidaridad”,
exclamó. La Embajadora Flores aprovechó para felicitar al Cardenal Rodríguez
por su liderazgo al frente de Caritas, como coordinador del Consejo de
Cardenales creado por Su Santidad el Papa Francisco en 2013, y por recibir el premio
en Derechos Humanos “Arzobispo Oscar Romero”, otorgado por la Universidad de
Dayton.
El evento contó con la participación del Reverendo
Juan de la Cruz Ribadeneira, quien compartió sus experiencias trabajando por
varias décadas con la comunidad Shuar en el Ecuador; el arzobispo Bernardito
Auza, Representante Permanente de la Santa Sede ante la ONU, y altos oficiales
de la Oficina del Presidente de la Asamblea General de la ONU.