Lunes 16 de marzo de 2015 – 09:50 AM
Por Daniel Trotta
LA HABANA (Reuters) - Cuba y Estados Unidos se
reunirán el lunes para una nueva ronda de conversaciones sobre la restauración
de sus relaciones diplomáticas, intentando que las diferencias sobre las
sanciones que Washington impuso a Venezuela -aliado de La Habana-, no minen los
esfuerzos para el histórico acercamiento.
La secretaria de Estado adjunta Roberta Jacobson se
reunirá en La Habana con Josefina Vidal, Directora de Estados Unidos en el
Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, en un diálogo que posiblemente
podría continuar el miércoles.
Jacobson y Vidal lideraron en La Habana las
delegaciones de ambos países en enero, en las primeras conversaciones para
restablecer los nexos diplomáticos interrumpidos hace 54 años. La segunda ronda
se produjo en febrero en Washington, pero la reunión del lunes tendrá lugar
entre equipos más pequeños y hasta ahora sin cobertura de medios.
Estados Unidos rompió relaciones diplomáticas con
Cuba en 1961 y ambos países mantuvieron las hostilidades incluso después del
fin de la Guerra Fría.
Pero el presidente Barack Obama marcó un giro en la
política estadounidense de aislamiento a Cuba y tras 18 meses de conversaciones
secretas consiguió el 17 de diciembre anunciar de conjunto con el presidente
cubano, Raúl Castro, que buscarían restablecer relaciones diplomáticas y
liberar a prisioneros de ambas partes.
Obama dijo a Reuters el 2 de marzo que esperaba que
Estados Unidos inaugurara una embajada en Cuba antes de la Cumbre de Las Américas
en Panamá, el 10 y 11 de abril, fecha en la que Obama y Castro podrían tener su
primer encuentro cara a cara desde el apretón de manos entre ambos mandatarios
durante el funeral de Nelson Mandela en diciembre de 2013.
Antes de comprometerse a restaurar los lazos, Cuba
quiere ser eliminado de la lista de estados patrocinadores del terrorismo del
Departamento de Estado de Estados Unidos y encontrar un banco dispuesto a
gestionar las transacciones de su misión diplomática en el país norteamericano.
Por su parte, Estados Unidos busca aumentar el
personal de su misión en La Habana e intenta que sus diplomáticos puedan viajar
dentro de la isla sin restricciones.
Ambas partes informaron de avances en estas
cuestiones después de las dos primeras rondas de conversaciones.
Luego, el 9 de marzo Estados Unidos declaró al
aliado más cercano de Cuba, Venezuela, como una amenaza a la seguridad y ordenó
sanciones contra siete funcionarios del país petrolero.
Funcionarios estadounidenses han dicho que el
problema de Venezuela no debería afectar a las conversaciones con Cuba.
Pero el ministro de Relaciones Exteriores de la
isla, Bruno Rodríguez, señaló que cualquier ataque a Venezuela implicaba
también un ataque a Cuba, argumentando que "Estados Unidos ha provocado un
daño grave al ambiente hemisférico en víspera de la Cumbre de Las
Américas".
"Espero que el Gobierno de Estados Unidos
comprenda que no se puede manejar a Cuba con una zanahoria ni a Venezuela con
un garrote", dijo Rodríguez el sábado durante una visita a Venezuela.