Jueves 05 de marzo de 2015 – 08:00 AM
Omar Treviño, alias "Z-42", jefe máximo
del debilitado cártel Los Zetas y uno de los capos más sanguinarios de México,
fue detenido el miércoles en el segundo gran golpe del gobierno al narcotráfico
en una semana.
Militares capturaron de madrugada a Treviño en San
Pedro Garza García, uno de los municipios más ricos de México situado en la
zona metropolitana de Monterrey (norte), en un operativo en el que no se
efectuó un solo tiro, anunciaron autoridades.
El capo, que tiene entre 38 y 41 años, había asumido
el liderazgo de Los Zetas tras la captura en julio de 2013 de su hermano y
mentor en el mundo del crimen Miguel Ángel Treviño, alias "Z-40".
Al mando de este grupo creado por ex militares
desertores, los hermanos Treviño estuvieron entre los capos más temidos en la
llamada "guerra al narcotráfico" en México.
A Omar Treviño se le considera "uno de los
delincuentes más peligrosos y sanguinarios" de México, dijo Tomás Zerón,
director de la agencia de investigación criminal de la fiscalía, durante la
presentación a los medios del "Z-42" en el aeropuerto de Ciudad de
México.
Vestido con pantalón negro y camisa clara, y
luciendo un tatuaje en el pecho, Treviño fue conducido por militares desde un
avión de la Fuerza Aérea a un vehículo blindado.
Monte Alejandro Rubido, comisionado nacional de
seguridad, hizo un recuento de los crímenes más brutales atribuidos a Los
Zetas: ataques a representaciones diplomáticas de Estados Unidos, el incendio
de un casino de Monterrey en el que murieron 52 personas y la matanza de 72
migrantes de Centro y Suramérica en un rancho de San Fernando (noreste) en
2010.
Estados Unidos, que pretende su extradición, ofrecía
una recompensa de cinco millones de dólares por Treviño.
"Los Zetas representan lo peor en el crimen
organizado global: violencia, intimidación, corrupción y asesinatos
brutales", dijo la directora del departamento estadounidense antidrogas
(DEA), Michele M. Leonhart, en un comunicado en el que felicita al gobierno
mexicano por una detención que "ataca el corazón" del grupo.
Treviño, que se movía con poca protección para pasar
desapercibido, fue ubicado a raíz del seguimiento de su operador financiero
Carlos Arturo Jiménez, uno de los cuatro colaboradores detenidos también este
miércoles.
- Un temible cártel en horas bajas -
Fundados en los noventa por un líder del histórico
cártel del Golfo, Los Zetas fueron inicialmente un grupo de militares de élite
reconvertidos en sicarios.
Esta organización se expandió desde el noreste hasta
la frontera sur de México y por buena parte de Centroamérica sembrando el
terror a base de decapitar, mutilar y colgar a sus víctimas en puentes.
A Los Zetas se le tiene por el cártel que, con su
ultraviolencia, desató la escalada de atrocidades vivida en México a raíz de la
ofensiva militar contra el narcotráfico lanzada en 2006, desde cuando se han
cometido más de 80.000 asesinatos.
Hacia 2010 Los Zetas rompieron relaciones con el
cártel del Golfo, convirtiendo casi en un campo de batalla a ciudades de la
frontera con Estados Unidos.
Con la muerte de Heriberto Lazcano "Z-3" a
manos de militares en 2012, Miguel Ángel Treviño asumió la jefatura de Los
Zetas. Al ser detenido Miguel Ángel, Omar tomó el poder enfrentando una gran
resistencia entre las células regionales que conforman este cártel, también dedicado
a crímenes como el tráfico de migrantes, lavado de dinero y robo de
combustible.
"Por su perfil extremadamente violento (Omar)
no logró el reconocimiento que tenía su hermano" lo que derivó en
"mayores enfrentamientos dentro del grupo criminal", explicó Rubido.
Omar Treviño era despiadado y se habría jactado de
haber matado personalmente a unas 1.000 personas, dijo a la AFP Mike Vigil,
exjefe de operaciones internacionales de la DEA."Con Omar Treviño cayó el
último de los líderes sólidos de Los Zetas, aunque el problema grande ahora es
que si se dividen en grupos esto puede llevar a más violencia por la
competencia interna entre ellos", afirma Vigil.- Nuevo golpe a los capos
-La caída de Treviño llega poco después de otro gran golpe al narcotráfico: la
captura el viernes de Servando Gómez "La Tuta", jefe del cártel Los
Caballeros Templarios y capo más buscado de México.
Desde su asunción en 2012,
el gobierno de Enrique Peña Nieto ha descabezado a los principales cárteles
pero los expertos advierten que esto ha generado la eclosión de grupos
delincuenciales más pequeños dedicados a crímenes que afectan más a la
población como extorsiones o secuestros.
La detención en 2014 de Joaquín
"El Chapo" Guzmán, el narco más buscado del mundo, fue la más
importante de su gestión. El considerado sucesor de "El Chapo" al
frente del cártel de Sinaloa, Ismael "El Mayo" Zambada, sería ahora
el último gran capo mexicano en libertad.