Lunes 02 de marzo
de 2015 – 08:20 AM
SANTIAGO, Chile
(AP) — La presidenta de Chile visitó el sábado en el hospital a una niña de 14
años que sufre una enfermedad incurable —fibrosis quística— y que días atrás le
pidió permiso para morir por eutanasia.
La fibrosis
quística afecta a múltiples órganos, especialmente los pulmones, y genera
periódicas infecciones que deterioran los tejidos.
Michelle Bachelet
acudió —junto a la ministra de Salud, Carmen Castillo— al hospital Clínico de
la Universidad Católica donde se encuentra Valentina Maureira. Todos charlaron
con la niña y su padre durante más de una hora, informó el gobierno en un
comunicado.
"Quiero
agradecerle a la presidenta porque vino, se hizo presente y estuvimos charlando
una hora", comentó Maureira en un video difundido por el canal 24 horas de
la televisión nacional TVN sobre la visita de Bachelet al hospital.
Lo conversado no
transcendió a la prensa, pero sí se difundieron varias fotografías de la
visita, entre ellas una selfie de Valentina con la presidenta, en la cual ambas
aparecen sonrientes junto a un oso de peluche.
Valentina también
tuvo palabras de agradecimiento para todas las personas que le han enviado mensajes
en estos días.
"Bueno, darle
las gracias a la gente que me ha apoyado, que ha estado mandándome mensajes. No
he podido responder los mensajes porque son muchos. Gracias a la gente por
apoyarnos", dijo.
La solicitud de la
adolescente a la presidenta conmocionó esta semana al país.
"Solicito
hablar urgente con la presidenta porque estoy cansada de vivir con esta
enfermedad y ella puede autorizarme una inyección para quedarme dormida para
siempre", dice parte del vídeo que subió a YouTube sin avisar previamente
a sus padres Valentina, cuya enfermedad genética incurable ya acabó con la vida
de su hermano mayor cuando tenía seis años.
La fibrosis
quística afecta a múltiples órganos, especialmente los pulmones, y genera
periódicas infecciones que deterioran los tejidos.
Fredy Maureira, el
padre de la menor, afirmó en declaraciones a TVN que tras la visita de la
mandataria la niña tiene una visión más positiva, y que Bachelet nunca recibió
la carta en la que se explicaba la situación que vivía su hija.
"Es fuerte
pero tengo que respetar su decisión porque ella es la que está sufriendo esta
enfermedad", había dicho el jueves a The Associated Press.
"Yo perdí un
hijo de seis años por no tener dinero y no tener órganos... Ella quiere morir
dignamente", agregó el padre, recordando que la primera vez que escuchó el
deseo de Valentina lloró "toda la noche".
La petición también
reabrió el debate sobre la eutanasia en Chile, aunque el gobierno ya manifestó
que la legislación del país no permite acoger su solicitud.
"Se trata de
un tema del cual no es posible no sobrecogerse, estamos hablando de una menor
de edad y sobrecoge, genera sin duda solidaridad. Ahora, la normativa vigente
en Chile no permite que el gobierno acceda a una solicitud de esa naturaleza",
dijo el jueves el vocero Álvaro Elizalde.