Martes
24 de febrero de 2015 – 11:30 AM
Washington,
24 feb (EFE).- Las remesas recibidas en Latinoamérica y el Caribe aumentaron en
2014 un 4 %, hasta los 62.300 millones de dólares, la mayor subida desde la
crisis económica mundial que se desató en 2009, según un informe divulgado hoy
por el centro de estudios Diálogo Interamericano en Washington.
Los
aumentos más significativos se dieron en México y en Centroamérica, mientras
que un gran número de países suramericanos registraron caídas, algo que en la
mayoría de casos es atribuible a la persistente crisis económica en España.
El
crecimiento en el total para Latinoamérica se debió, en gran parte, a la mejora
del mercado laboral en Estados Unidos, a nuevos patrones migratorios y nuevos
métodos de envío de remesas, según el informe.
En
el caso de México, el volumen de remesas aumentó un 8,8 % en 2014 con respecto
al año anterior, algo que se debe a la mejora de la economía estadounidense,
pero también a la posibilidad de que los inmigrantes mexicanos se inclinen
ahora más que antes por mandar dinero a través de transferencias.
Otro
aumento significativo fue la subida del 12,5 % en Honduras y del 9 % en
Guatemala, países que han ocupado titulares por la oleada de inmigración de
menores y familias a Estados Unidos.
En
el caso de Panamá, con una subida del 61,6 %, ese aumento de remesas ha podido
deberse al papel que ese país desempeña como intermediario en un ciclo de
transferencias de capital desde Colombia a Panamá y de Panamá a Venezuela.
Por
contra, la crisis económica española, con alto nivel de desempleo y caída de
los salarios, está detrás de gran parte de los retrocesos en la llegada de
remesas a Bolivia (-2,4 %), Perú (-2,3 %) y Colombia (-15 %).
Según
Manuel Orozco, uno de los responsables del estudio, la causa de la mejora de
los datos de remesas recibidas en Latinoamérica es que "hay más
inmigrantes enviando más dinero".
En
el caso de España, Orozco observó que el hecho de que el desempleo haya seguido
incrementándose y la posibilidad de una leve mejoría económica es una noticia
positiva para los receptores de remesas, que podrían ver reducido el nivel de
retroceso actual. EFE