Lunes 29 de septiembre de 2014 – 09:25 AM
Washington, (Efe).- El presidente de Estados Unidos, Barack
Obama, reconoció que los servicios de inteligencia subestimaron el ascenso
del Estado Islámico de Iraq y Siria, en una entrevista con el
programa 60 Minutes de CBS. "Nuestro jefe de la comunidad de
inteligencia, Jim Clapper, ha reconocido que, creo, subestimaron lo que había
estado pasando en Siria", asegura Obama.
En mandatario consideró además que se subestimó la
capacidad de las fuerzas de seguridad iraquíes para luchar contra un enemigo
como el Estados Islámico. Obama señaló que el grupo radical suní -que
declaró un califato en junio en una franja de territorio de Iraq y Siria- se
mantuvo "bajo tierra" durante la última década mientras las tropas
estadounidenses lucharon contra Al Qaeda en Iraq pero la inestabilidad causada
por la guerra civil en Siria les dio espacio para prosperar. "En el
último par de años, durante el caos de la guerra civil de Siria, donde ha
habido enormes franjas del país completamente sin gobierno, fueron capaces de
reconstituirse y aprovecharse de ese caos", indicó en la entrevista, que
fue grabada el viernes.
Señaló que el EI se reagrupó y reclutó combatientes
extranjeros desde Europa, pasando por Estados Unidos, Australia y otras partes
del mundo musulmán, y Siria "se convirtió en el epicentro de los
yihadistas de todo el mundo." En este sentido señaló que se han
ayudado de una campaña de medios de comunicación social "muy
inteligente" y también cuentan con algunos militares que formaron parte
del Ejército del derrocado Sadam Husein que aportan "capacidad militar
tradicional" al grupo.
"Por eso tan importante para nosotros
reconocer que parte de la solución va a ser militar", señaló Obama que
apuntó a la necesidad de reducir su espacio de acción, su capacidad
armamentística y de abastecimiento, y cortar su financiación.
No obstante, en la línea de lo expresado por su
Gobierno señaló que para lograr una paz duradera todo esfuerzo debe venir
acompañado de una solución política. "Tenemos que llegar a soluciones
políticas en Iraq y Siria, en particular, pero en Oriente Medio en
general", agregó el mandatario que consideró que se trata de un "reto
generacional" y mostró su preocupación porque haya jóvenes "más
preocupados por si son chiís o sunís, que por si están recibiendo una buena
educación".
Estados Unidos inició en agosto una campaña de
ataques aéreos contra objetivos del EI en Iraq que recientemente ha extendido a
Siria y se propone además entrenar a la oposición moderada siria para que combata
al grupo yihadista sobre el terreno. En cuanto a Siria, señaló que no se
va a conseguir la estabilidad con el presidente Bachar al Asad en el Gobierno
porque hay sunís en área del país que han sufrido "terribles
atrocidades" bajo su régimen. "Para que Siria permanezca unida,
no es posible que Asad presida todo este proceso", dijo.
En cuanto a las prioridades de Estados Unidos, de
cara a la ayuda que se va a dar a la oposición moderada siria, que lleva tres
años intentando derrocar a Al Asad, señaló que lo primero es combatir al EI y
al grupo
Khorasan porque "pueden matar
estadounidenses". El mandatario destacó el papel de Estados Unidos
como "nación imprescindible" en la coalición internacional formada
para combatir al EI porque "cuando hay problemas en cualquier lugar del
mundo, no llaman a Pekín, no llaman a Moscú, nos llaman a
nosotros". "Tenemos capacidades que nadie más tiene.
Nuestras
Fuerzas Armadas son las mejores de toda la historia del mundo", aunque
insistió que los 1.600 militares enviados a Iraq están allí para capacitar y
entrenar a las fuerzas iraquíes y kurdas contra el EI, no para participar en el
combate.