Miércoles
17 de septiembre – 12:00 PM
Tegucigalpa,
Honduras - En ocasión del “Día del Maestro”, el Comisionado Nacional de los Derechos
Humanos, Dr. H. Roberto Herrera Cáceres, destaca el valor de la educación de
los habitantes de Honduras como contribución indispensable para vigorizar la
democracia y la seguridad humana, nacional e internacional.
El derecho humano a la educación fortalece la
capacidad de cada persona de controlar su propia vida; de proteger y defender
apropiadamente su dignidad humana; y de participar más productivamente en el
desarrollo de su familia, comunidad local y de Honduras.
La educación es un derecho
fundamental e imprescindible para el ejercicio de todos los demás derechos por
todas y todos los habitantes e instrumento indispensable para que los adultos y
los niños -económica y socialmente
marginados- puedan tener oportunidades y
posibilidades de superar las condiciones de pobreza, la exclusión y la
discriminación que afecta nuestra sociedad. El interés superior del niño
constituye un límite infranqueable a la discrecionalidad de las autoridades. No
hay razones que puedan justificar la negación de la educación, un derecho
humano reconocido constitucionalmente y en instrumentos internacionales.
La educación es
función esencial del Estado para la conservación, el fomento y difusión de la cultura;
el pleno desarrollo de la persona humana; y el fortalecimiento del respeto a
los derechos humanos y a las libertades fundamentales. Debe generar profundos sentimientos
hondureñistas y vincularse directamente
con el proceso de desarrollo humano de la nación hondureña.
Es responsabilidad principal de los representantes del Estado de
Honduras el cumplimiento del derecho humano a la educación, el cual los
maestros (así como la familia, la comunidad local y el gobierno local) tienen
el deber de contribuir a asegurar eficazmente. Para el cumplimiento debido,
todos esos responsables deben necesariamente tener o buscar capacitación en el
área de los derechos humanos.
Maestros de Honduras, el Comisionado Nacional
de los Derechos Humanos les saluda y rinde homenaje a su noble labor educativa
que considera necesaria para hacer posible el avance de la cohesión, la paz y
el bienestar de la hondureñidad.
Reciban nuestras sinceras
felicitaciones y el deseo que sigan cosechando éxitos en el ejercicio abnegado
de su profesión.