Martes 10 de diciembre de 2013 – 10:58 PM
SANTA RITA, YORO, Honduras La víctima mortal es Enid Marlem
Rodríguez Canales (50), quien falleció de manera instantánea al recibir varios
disparos de manos de su hija adoptiva de 15 años, mientras el menor resultó con
una herida en la mano y en la pierna derecha.
La joven, que luego del hecho intentó darse a la fuga, fue
capturada por vecinos que al escuchar los disparos llegaron al lugar para
auxiliar a las víctimas. El menor fue trasladado de emergencia al hospital
público de El Progreso.
Mientras la muchacha fue llevada en una patrulla de la
Policía Preventiva a El Progreso, donde fue puesta a la orden de los tribunales
de justicia para que pague por el asesinato. Vivo de milagro Mientras esperaba
para ser ingresado al quirófano del hospital progreseño, el menor relató que
“todo comenzó cuando mi mamá le quitó el celular a ella y me dijo que le leyera
todos los mensajes que tenía, porque sospechaba que andaba en cosas malas”. “Durante
varios minutos mi prima le pidió que se lo diera, pero mami no le hizo caso y
le seguí leyendo el contenido, seguía insistiendo, ya molesta entró varias
veces al cuarto.
Ella tenía la pistola escondida en el cuarto”, relató. “Ya
iban a ser las 11:00 de la noche y mi mami apagó la luz y se quedó recostada en
el sofá en la sala de la casa y fue en ese momento que mi prima regresó y le
disparó con una pistola en la cabeza”, dijo. “Al escuchar los disparos yo corrí
junto a mi papá a intentar quitarle el arma, fue cuando ella me disparó. Luego
apuntó a mi papá, pero el arma no disparó y luego intentó huir y fue cuando los
vecinos la agarraron”.
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