Por Julia RIOS (AFP)
Managua — El Parlamento de Nicaragua inició este lunes el
camino de una polémica reforma constitucional que elimina la prohibición de la
reelección presidencial y allana el camino a un tercer periodo consecutivo del
presidente Daniel Ortega en 2016.
El pleno de la cámara fue convocado este lunes a una sesión
especial el miércoles con "el único propósito" de presentar el proyecto
de reformas y enviarlo a una comisión para su dictamen, dijo a la AFP la
secretaria del Parlamento, la sandinista Alba Palacios.
La iniciativa, presentada el viernes de forma sorpresiva a
la directiva de la Asamblea Nacional (parlamento) por los 63 diputados del
gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), contempla cambios
en dos títulos y 39 artículos y deroga otros ocho.
Una de las principales modificaciones es la que elimina la
prohibición de la reelección presidencial sucesiva, que ya había sido declarada
"inaplicable" por la Corte Suprema de Justicia en el caso de Ortega,
cuando éste se postuló para continuar en el cargo en las elecciones de 2011.
El proyecto institucionaliza los llamados "gabinetes de
la familia", antes conocidos como "comités del poder ciudadano",
que la población identifica como órganos de control político en los barrios.
Además habilita a los militares en servicio activo a ocupar
cargos de entidades públicas, que no sean de elección popular.
La reforma también incluye los nuevos límites marítimos en
el mar Caribe de acuerdo con las sentencias de la Corte Internacional de
Justicia (CIJ) en los procesos contra Colombia en 2012 y Honduras en el 2007.
En la reunión de junta directiva de este lunes se formó una
comisión especial que estará dirigida por Palacios y el liberal Wilfredo
Navarro como miembros del directorio, dijo la legisladora.
También la integran el jefe de la bancada sandinista, Edwin
Castro, sus colegas Irma Dávila y José Figueroa y los diputados Raúl Herrera y
Javier Vallejos por el Partido Liberal Independiente (PLI).
En su exposición de motivos, los diputados mocionantes
señalan que los cambios a la Carta Magna institucionalizarán un modelo de
democracia directa inspirado en "valores cristianos, ideales socialistas y
prácticas solidarias".
Sin embargo, el experto en temas constitucionales Gabriel
Alvarez estimó, en declaraciones a la prensa, que el proyecto provocará cambios
en el sistema político y "debilitará el sistema de controles de pesos y
contrapesos" políticos.
Según Alvarez, con la reforma no solo se garantiza la
reelección de Ortega, sino su permanencia en el poder sin la exigencia de la
doble vuelta electoral y con una elección de una mayoría mínima de los votos.
Para la diputada Palacios, "hay que ver lo positivo del
proyecto" y no magnificar el tema de la reelección.
"Quien decide quién va a ser el presidente es el pueblo
de Nicaragua. Cuando el FSLN perdió (en 1990) había reelección sucesiva, pero
fue el pueblo el que decidió. El pueblo es quien tiene los votos para tomar
decisiones", argumentó Palacios.
En 1990, al concluir su primer periodo como presidente,
Ortega fue derrotado en las urnas por Violeta de Chamorro, quien gobernó hasta
1997.
Ortega volvió al poder en enero del 2007 tras 16 años en la
oposición y, en virtud del fallo de la Corte Suprema de Justicia (CSJ)que
declaró inaplicable el artículo que impide la reelección sucesiva, ganó la
tercera elección en 2011.
"Yo creo que no hay que tenerle miedo a la reelección.
Lo que hay que garantizar son los mecanismos que te den el tuyo y el mío en las
elecciones", declaró de su lado Navarro, electo bajo la insignia del
derechista Partido Liberal Constitucionalista (PLC).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario