El detenido,
Enrique Olivares García, estaba desequilibrado y accedió al domicilio
identificándose como funcionario de prisiones
ALFONSO
OJEA 23-10-2013 - 18:50 CET
Aunque en un
primer momento se decía que iba vestido de sacerdote, llevaba ropa de color
negro. El supuesto agresor ha sacado una pistola, momento en que el hijo del
extesorero del PP ha conseguido reducirle y llamar a la Policía.
Sobre las
seis menos cuarto de la tarde, un hombres vestido de negro irrumpía en la casa
de la familia Bárcenas, en la madrileña calle de Príncipe de Vergara.
Este hombre
de 63 años, con sus facultades mentales más que alteradas, ha logrado
penetrar en la vivienda de la familia Bárcenas y maniatar con bridas tanto
a la esposa del extesorero del PP, su hijo e incluso a la empleada de la
limpieza.
Sin embargo,
el hijo de Bárcenas ha logrado liberarse y se ha enfrentado al hombre que iba
armado con una pistola. Ese instante ha sido aprovechado por la asistenta
para salir a la calle y pedir ayuda. Justo en ese momento, un radiopatrulla de
la Policía Municipal pasaba cerca del domicilio y ha procedido a la detención
de este individuo, que ha sido trasladado a comisaría, tras reducirlo porque
siempre se ha mostrado violento.
Lo
paradójico es que los Bárcenas han abierto la puerta del domicilio porque se
trataba de un funcionario de prisiones al que sin embargo no conocían. Ante los
agentes ha reconocido que ha venido "desde Cuenca a Madrid para
solventar el problema de España".
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