05/09/2017
San Salvador. El canciller de El Salvador, Hugo
Martínez, aseguró hoy que la decisión de EE.UU. de acabar con el programa de
Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), que protege a 800.000
jóvenes, es "preocupante" pero "no significa que habrá
deportaciones inmediatas y directas".
"La decisión del presidente estadounidense,
Donald Trump, de acabar con DACA no significa que de inmediato se procederá a
las deportaciones de jóvenes, que si bien es cierto algunos trabajan, la gran
mayoría son estudiantes que aportaron o aportarán a la nación
norteamericana", dijo Martínez durante una conferencia de prensa.
El canciller señaló que esta "es una situación de
la que nos tenemos que preocupar, aunque no debemos de olvidar que podemos
buscar alternativas".
El diplomático detalló que de los 800.000 jóvenes
protegidos en el programa DACA, unos 600.000 son de México y entre 30.000 y
60.000 son salvadoreños.
Martínez instó a los beneficiados del DACA a que
"acudan a los representantes de su afinidad política para que les
expliquen la importancia que tiene este programa y la contribución que (ellos)
dan a esa nación".
El ministro agregó que la próxima semana un grupo de
diputados salvadoreños lo acompañará en un viaje a Estados Unidos para sostener
una reunión con congresistas de ese país, con el fin de abordar el tema del
Estatus de Protección Temporal (TPS), que ampara a unos 190.000 salvadoreños, y
el fin de DACA.
El fiscal general de EE.UU., Jeff Sessions, uno de los
miembros del Ejecutivo de Trump con posiciones más duras en inmigración,
anunció este martes la suspensión de DACA, que se hará efectiva dentro de seis
meses.
Durante este tiempo, el Congreso, el único con poder
para cambiar el sistema migratorio, deberá encontrar una solución para
regularizar la situación de estos jóvenes indocumentados, conocidos como
"soñadores" (dreamers).
Ya se han presentado en ambas Cámaras norteamericanas
proyectos de ley bipartidistas para dar amparo a estos jóvenes indocumentados,
pero ninguna ha conseguido avanzar. EFE