Martes 06 de junio de
2017
Transcripción completa de
la entrevista realizada por los presidentes de las diez mayores agencias del
mundo, entre ellas Efe, al presidente ruso, Vladímir Putin.
· -"Rusia no tiene
nada que ver a nivel de Estado con los piratas informáticos".
· -"Si la OTAN se
acerca a nuestras fronteras, Rusia no se puede quedar mirando".
· -"La rusofobia
salta a la vista y en algunos países cruza todas las líneas".
· -"Si Suecia entra
en la OTAN lo consideraremos una amenaza y habrá que responder".
La primera respuesta del
presidente ruso fue a una pregunta del director general de la agencia TASS,
Serguéi Mijáilov, sobre la "rusofobia":
Putin: Antes que nada, me
gustaría hablar sobre las causas de lo que ocurre, sobre las causas de esta
rusofobia. Esta salta a la vista y en algunos países cruza todas las líneas.
¿A qué se debe? En mi
opinión, esto tiene que ver con el establecimiento de un mundo multipolar y
esto no le gusta a los monopolistas. El monopolio, como se sabe, es algo malo,
pero los monopolistas siempre luchan por él en todos los ámbitos, en todos los
sectores y ámbitos de nuestra vida.
Se establece un mundo
multipolar y esto sucede, y no en último lugar, gracias a la lucha de Rusia por
sus intereses. Quiero subrayar: por sus intereses legítimos. Esta es la primera
parte.
La segunda consiste en
que cierto tiempo atrás nuestros socios en determinados países comenzaron a
emprender intentos para contener a Rusia, para contener su afán legítimo de
garantizar sus intereses nacionales, con acciones que no se inscriben en el
marco del derecho internacional, incluidas restricciones de carácter económico.
Y ahora ven que esto no funciona, que el efecto es nulo. Y esto suscita
irritación interna, el deseo de conseguir su objetivo por cualquier medio, el
afán de agravar la situación. Pero lamentablemente para los que lo hacen,
nosotros no damos motivos. Tratan, como dice la gente, de buscar pretextos en
la nada.
¿Va durar mucho esto?
Creo, en cualquier caso confío, que no mucho, no será eternamente, ya que se
deberá tomar conciencia de que esto es contraproducente y perjudica a todos.
Desde luego, nos causa cierto daño, pero también daña a quienes impulsan esa
política. A mi modo de ver, ya se está tomando conciencia. Vemos muy claramente
determinados cambios en la situación. Confío en que esta tendencia se
mantendrá.
Pregunta: En Alemania,
donde muy pronto hay elecciones, se reacciona con bastante nerviosismo a los
posibles ciberataques por parte de Rusia. Y es posible que los piratas
informáticos rusos quieran inyectar alguna información falsa en la campaña
electoral. ¿Cree que es posible?
Respuesta: Los piratas
informáticos pueden estar en cualquier sitio, pueden salir de cualquier parte
del mundo. Y claro que el ambiente general en las relaciones interestatales
tienen mucho que ver con esto, porque los 'hackers' son gente libre, como los
pintores. Un día los pintores se levantan de buen ánimo y se dedican a pintar.
Lo mismo pasa con los 'hackers'. Se despiertan por la mañana y se leen lo que
pasa hoy en las relaciones interestatales, y si son patriotas quieren poner su
grano de arena en lo que consideran una justa lucha contra aquellos que hablan
mal de Rusia. ¿Es posible eso?
Teóricamente sí. Pero a nivel de Estado nunca
hemos hecho estas cosas. Esto es lo más importante.
También me puedo imaginar
que alguien lo haga a propósito, creando una cadena de ataques cibernéticos de
tal manera que el territorio de Rusia sea su origen. Las tecnologías
contemporáneas lo permiten y es algo que se puede hacer con bastante facilidad.
Pero lo más importante es
que ningún pirata informático puede influir de forma decisiva en una campaña
electoral en otro país. Ninguna información puede tener ningún efecto sobre la
conciencia de los votantes y del pueblo, no puede afectar al resultado final.
Esta es mi respuesta. No nos dedicamos a esto a nivel de Estado ni tenemos
intención de hacerlo. Al contrario, intentamos luchar con esto en nuestro país.
En cualquier caso, estoy seguro que los 'hackers' no podrán influir en la
campaña electoral de ningún país de Europa, Asia o América.
P:Se habla mucho de las
buenas relaciones entre usted y el señor Trump. ¿Don ustedes tan amigos como se
dice?
R:No nos conocemos. No
nos hemos visto ni una sola vez. Pero el candidato Trump dijo que las
relaciones con Rusia tenían un nivel muy bajo y que había que mejorar esa
relación. Estamos dispuestos a dialogar con Trump. Tengo que reconocerle que a
mi me encantan este tipo de personas: son sencillos, directos, tienen una
visión muy franca de las cosas y eso puede ser muy provechoso.
No me pregunten sobre qué
consejo le daría porque un tipo como Trump no necesita consejo alguno y menos
aún el consejo de un homólogo suyo, porque siempre se va a malinterpretar, y
por tanto sería contraproducente.
Lo que sí quiero dejar
claro es que nos interesa mucho abrir líneas de diálogo con el señor Trump,
aunque no se si eso será posible.
Me une con el señor Trump
el que ni él ni yo éramos políticos profesionales. Yo no era miembro de ningún
partido y no me considero un político profesional.
No sé cómo se siente
Trump a este respecto, pero créame que no es oportuno decir lo que me gusta o
no del señor Trump. Simplemente que necesitamos establecer una buena política
de relación personal. No sé si será posible, pero tenemos mucha paciencia y
vamos a esperar a ver que ocurre.
P:¿Cómo valora las
perspectivas de solución del problema nuclear de Corea del Norte, sobre todo en
el contexto de la actividad de las tropas estadounidenses en la región?
R: Al igual que pasó con
Irán, se puede hablar de la amenaza nuclear de Corea del Norte. Pero no creo
que se trate de Corea del Norte. Incluso si Corea del Norte declara mañana que
cancela todos sus ensayos nucleares y sus programas de misiles, el despliegue
del sistema de defensa antimisiles de EEUU continuará. Será con otro pretexto o
sin pretexto, como hacen en Europa.
Cuando hablábamos del
sistema de defensa antimisiles en Europa, nos decían todo el tiempo que se
hacía para neutralizar el programa nuclear y la amenaza procedente de Irán.
Supuestamente. Ahora se ha firmado un acuerdo con Irán y ya no hay ninguna
amenaza y así lo confirma la Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Pese a todo, el despliegue del sistema de defensa antimisiles continúa a un
ritmo rápido. ¿Contra quién?
Siempre hemos dicho que
nos están engañando. Y nos respondían que todo era por Irán. Y ahora yo soy el
único que habla de esto, mientras que todos los demás están callados como si no
entendieran de que estamos hablando. Ustedes lo entienden todo. Entonces, ¿por
qué se quedan en silencio? Ustedes siguen todos callados, mientras la situación
empeora. Todo esto empuja hacia una nueva carrera armamentística. Es algo
obvio. Nosotros estamos todo el tiempo pensando en cómo responder. Pensamos en
cómo perfeccionar nuestros sistemas para superar el escudo antimisiles.
P: En este contexto,
¿cree posible la desmilitarización de las Islas Kuriles?
R: El incremento de
nuestro potencial militar en el Oriente Lejano de Rusia en general y en las
islas en particular no es por iniciativa nuestra, al igual que en Europa. Las
bases de la OTAN se acercan a nuestras fronteras occidentales, crecen sus infraestructuras
y su contingente (militar). ¿Qué debemos hacer, quedarnos mirando? No, no va a
ser así. Reaccionamos de la forma correspondiente.
Lo mismo pasa en Oriente.
Se nos acerca un portaaviones estadounidense, otro. Dicen que el tercero ya
está en camino. Los portaaviones llegan y se van, pero tenemos un sistema de
defensa antimisiles que nos preocupa mucho y ya llevamos diez años hablando de
esto. Es algo que destruye el equilibrio estratégico en el mundo.
Todos ustedes son
personas adultas y con décadas de experiencia en el mundo de la información,
pero callan todo esto. El mundo está en silencio como si no sucediera nada.
Nadie nos escucha. O nos escucha, pero no lo difunde. Y la opinión pública
internacional ignora lo que pasa. En Alaska, ahora también en Corea del Sur
aparecen elementos del escudo antimisiles. ¿Debemos quedarnos mirando al igual
que en la parte occidental de Rusia? Pues no. Nos planteamos cómo responder a
esos retos, porque para nosotros es un reto.
Lo mismo pasa con las
islas. Pensamos en cómo garantizar nuestra seguridad, cómo neutralizar las
amenazas en nuestras fronteras lejanas. Y en ese sentido, las islas son un
emplazamiento cómodo para hacerlo. Así que no estoy de acuerdo en que estemos
empezando la militarización de esas islas de forma unilateral. Se trata de una
necesaria respuesta a lo que sucede.
En cuanto a la
posibilidad teórica del despliegue de tropas estadounidenses en esas islas
suponiendo que algún día pasen bajo la soberanía de Japón. Pues sí, esa
posibilidad existe. Deriva del acuerdo (entre EEUU y Japón) y de los protocolos
firmados. No nos los enseñan, pero conocemos en general su contenido. Ahora no
voy a dar los detalles, pero los conozco. ¿Acaso queremos empeorar nuestras
relaciones con EEUU? No, no queremos hacerlo y aunque nada nos da miedo, vemos
lo pasa ahora en EEUU. Toda esa campana antirrusa, esa rusofobia, continúan. No
sabemos cómo se desarrollará esa situación, porque no hemos iniciado ese
proceso. En esta situación, para nosotros es absolutamente inaceptable tan
siquiera suponer que mañana puedan aparecer allí (en las Kuriles) bases o
elementos del escudo antimisiles.
Claro que es posible
lograr la desmilitarización de las islas, pero no es suficiente. Debemos pensar
en reducir la tensión en toda la región. Sólo así podremos lograr acuerdos de
largo alcance, aunque ahora mismo no podemos decir cómo serán.
P:En Suecia hay ahora un
intenso debate sobre la incorporación o no a la OTAN. ¿Cual es su opinión al
respecto?
R: Es evidente que si
Suecia ingresa en la OTAN eso va a impactar de forma negativa en nuestras
relaciones. Lo consideraríamos como una amenaza adicional.
No nos vamos a poner
histéricos, pero de alguna manera tendremos que responder. Los suecos sabrán si
es algo que necesitan, pero ninguna persona con buen criterio puede ni tan
siquiera imaginar que Rusia va a atacar a Suecia.
Se están dando muchas
informaciones falsas sobre si nuestros submarinos están cerca de Suecia, etc.
Eso es completamente falso. Y yo me pregunto: ¿realmente le interesa a Suecia
estar involucrada en este conflicto?
P: Este año hay
elecciones en Alemania. ¿Le gustaría trabajar con la canciller Angela Merkel o
con el señor Martin Schulz?
R: Ángela Merkel y yo nos
conocemos desde hace mucho tiempo. Tenemos diferencias, pero también tenemos
muchos puntos de conexión, sobre todo en cuestiones de cooperación económica.
Por cierto que en algunos aspectos de política internacional también tenemos
opiniones en gran parte parecidas. Pero insisto, hay problemas cuyas posibles
soluciones entendemos de forma distinta.
Al señor Schulz apenas le
conozco, pero tiene una amplia experiencia tanto en la política europea como
alemana, y ha vuelto hace poco a la política alemana. A nosotros, y me refiero
a todo el equipo (del Gobierno) ruso, en principio nos da igual con quién
trabajar. Lo importante es que esa gente se oriente a una cooperación
constructiva. No tenemos ninguna preferencia. En mi opinión, si tanto nosotros
como nuestros socios nos centramos en los intereses fundamentales de nuestros
países, en lugar de dejarnos llevar por la coyuntura, seguro que encontraremos
puntos de conexión y el camino correcto para una cooperación efectiva.
No tengo ninguna duda al
respecto, porque tenemos muchos intereses en común. La interdependencia en
algunos sectores económicos es tal que de nuestra cooperación dependen decenas
de miles o incluso cientos de miles de puestos de trabajo tanto en Alemania
como en Rusia. Es un factor importantísimo de nuestra convivencia en el mundo
actual, sobre todo en Europa.
Algunos productores
alemanes obtienen una enorme rentabilidad del mercado ruso. No hace falta ser
un gran especialista para darse cuenta que también la economía rusa tiene
interés en la cooperación tecnológica (con Alemania). Hay que decir que hacemos
mucho y con éxito en este ámbito. No sólo porque se están recuperando los
volúmenes de comercio con la República Federal, que creo que han crecido en un
40 por ciento en el primer trimestre. También estamos llevando a cabo toda una
serie de proyectos en los que la localización en territorio de Rusia de
industrias (alemanas) de alta tecnología alcanza entre un 60 y 70 por ciento.
Un buen ejemplo es la industria automovilística.
Ninguna empresa alemana
se ha ido del mercado ruso pese a todas las dificultades de carácter político.
Todas siguen trabajando, incluso en medio de las dificultades económicas como
la caída del PIB, la reducción de los ingresos reales de la población, y en
consecuencia, la caída de la demanda. Nosotros, por parte del Estado, tratamos
de apoyarles.
Por no hablar de la
energía. Alemania ha renunciado a la energía nuclear, mientras que en la
estructura de su balance energético la energía nuclear ocupa un gran
porcentaje, mayor que el de Rusia. ¿De dónde sacará entonces los recursos)
primarios? Las reservas de Noruega se están agotando, al igual que las de Reino
Unido, que pronto se convertirá en consumidor neto. Ya en la pasada edición del
Foro hablamos de las perspectivas de la península de Yamal, donde tenemos unas
reservas de 2,7 billones de metros cúbicos de gas. Me acaba de informar Gazprom
que hemos descubierto allí recursos añadidos, hasta el doble. Otros 4,2
billones de metros cúbicos.
Y todo esto sólo en un lugar, en un territorio no
muy grande. La cooperación en este campo es de sentido común, a tenor de la
cercanía entre Rusia y Europa, la logística barata y los procedimientos
consolidados. Hablamos de una energía barata, la más ecológica entre los
hidrocarburos.
Los contratos
(energéticos) de larga duración garantizan suministros estables y la
competitividad de toda la economía alemana. Es algo sumamente importante. Una
energía relativamente barata obtenida de una fuente segura.
Además, históricamente
tenemos unas relaciones humanitarias consolidadas, siempre las hemos tenido.
Pese a la tragedia de la dos guerras (mundiales), el contacto entre nuestros
pueblos siempre se ha mantenido. ¿Por qué digo esto? Confío en que las personas
que se pongan al frente de la República Federal sean capaces de valorar esas
relaciones y esos factores fundamentales jugarán, pase lo que pase, un papel
positivo.
P: Con relación a España,
¿está dispuesto a trabajar en una política de exenciones de visados para
favorecer las relaciones bilaterales?
R: En Rusia estaremos
encantados en poder flexibilizar la política de visados con España, pero más
que un problema nuestro, es un problema de España, que es quien tiene
restricciones debido a que pertenece al espacio Schengen.
Pero habría muchas
opciones para aligerar esa política. Un ejemplo puede ser Turquía, donde
tenemos un sistema de visados muy simple que podríamos copiar para España. Eso
permitiría liberalizar los visados para los jóvenes, políticos, personal de
organismos oficiales, y por supuesto para el turismo.
P:¿Qué análisis hace
sobre la situación extrema que se vive en Venezuela? ¿Cómo ve el acercamiento
entre Estados Unidos y Cuba?
R: Venezuela es un país
que está viviendo una lucha política muy intensa. Queremos que tanto la
oposición como el gobierno respeten las reglas del juego, acaten la
Constitución y no permitan los radicalismos.
Con relación a Cuba,
saludamos la relación con Estados Unidos. Se demuestra que la política de
sanciones no sirve para nada. En el caso de Cuba solo sirvió para perjudicar a
los cubanos. Fue una buena decisión de Obama que nosotros saludamos y
aprobamos.
P:¿Cuándo va a anunciar
su decisión sobre si concurrirá o no a las presidenciales de marzo de 2018 en
Rusia?
R: Ahora no es la hora.
Queda alrededor de un año y eso es mucho tiempo y eso en el mundo contemporáneo
de la política es demasiado. Tenga en cuenta que al empezar cualquier
precampaña electoral todo el mundo deja de trabajar y yo no voy a contribuir a
eso. Por eso no voy a adelantar nada ahora. Será más tarde. Hay que esperar.
P: ¿Hay señales de
recuperación de la economía rusa?
R: Vamos mejor, eso es
evidente. El año pasado hemos logrado estabilizarnos y nos hemos acostumbrado a
convivir con un precio bajo del petróleo. Estamos trabajando en diversificar
nuestra economía. La prueba es que los productos sometidos a un valor añadido
están creciendo. El PIB empezó a crecer el último trimestre del pasado año un
0,3 por ciento. Este años hemos constatado un crecimiento del consumo de los
recursos energéticos y del transporte en un 0,5 por ciento.
La realidad es que nada
ha cambiado con las sanciones. La economía rusa se está recuperando. La
inversión extranjera creció el pasado año en cinco veces, ayudando al superávit
de la balanza comercial. Tenemos una tasa de inflación del 4,6 por ciento, la
más baja en la historia de la Rusia moderna. Y un desempleo del 5,2 por ciento,
que es mucho menor que el de muchos países europeos.
Hemos ido construyendo
poco a poco una cadena de incentivos para apoyar nuestra economía. Estas y
otras cifras las voy a poder presentar en la sesión plenaria de mañana. José
Antonio Vera y Virginia Hebrero EFE