Lunes 25 de mayo de 2015 – 11:30 AM
Tegucigalpa, Honduras - Con un solo sentir y con un
alto compromiso con la ciencia y la verdad, un equipo de médicos forenses se ha
concentrado, en lo que va del año, en la realización de 52 exhumaciones, por
igual número de casos que están en investigación y que requieren una respuesta
del sector justicia penal para no quedar en la impunidad.
En ese sentido, según lo manifiesta el galeno Juan
Leonel Cruz con amplia experiencia en el tema, hay una efectiva coordinación
entre médicos legales, cuerpos de investigación, alcaldías, juzgados, y otras
autoridades administrativas para hacer efectivas las exhumaciones.
Y es que este procedimiento permite extraer o
retirar un cadáver de su fosa después que fue inhumado con el propósito de
establecer las causas que provocaron la muerte de dicho ser humano. En ese
sentido, amplió Cruz, generalmente estas personas han sido muertas y posteriormente
enterradas con el propósito de ocultar un crimen por lo que resulta fundamental
establecer causa y manera de muerte y hacer lo posible por encontrar la mayor
cantidad de indicios o evidencias en el cuerpo que llevan a posteriores
análisis de laboratorio y por ende a encontrar la verdad.
Retirado el cadáver de la fosa, los forenses lo
trasladan al servicio de Patología Forense para realizar la respectiva autopsia
y verificar de forma científica, la causa de muerte y comprobar qué tipo de
exhumación la cual puede ser administrativa, arqueológica, criminal, judicial
entre otras.
Cruz informó que los trabajos de exhumación se
hacen coordinados en principio con los juzgados competentes ya que este
procedimiento requiere autoridad judicial e interviene como actor importante la
Secretaría de Salud, fiscales del Ministerio Público, Técnicos de Inspecciones
Oculares, agentes de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC),
odontólogos forenses, técnicos en dactiloscopia.
El Servicio de Patología Forense de Tegucigalpa y
Morgue Judicial en lo que va del año ha atendido solicitudes de exhumaciones
provenientes en su mayoría del departamento de Olancho, particularmente de
Juticalpa, Catacamas, Guarisama, Santa María del Real, Dulce Nombre de Culmí,
así mismo de Intibucá, Comayagua, La Paz, Siguatepeque, Nacaome, Choluteca, Danlí,
Reitoca, Ciudad España, Centro de Menores, Cementerio General de Comayagüela
entre otros
